El cáncer de mama metastásico (CMM) es uno de los mayores retos dentro del ámbito de la oncología en cuanto a investigación y tratamientos. Se diagnostica cuando las células malignas se han dispersado a otras partes del cuerpo más allá de la mama, afectando órganos como el hígado, los pulmones, los huesos o incluso el cerebro.
Afecta a más de 2.000 personas cada año en España, y se estima que alrededor de 30.000 personas en Europa padecen esta enfermedad. Cada día, 18 mujeres mueren por cáncer de mama metastásico: 6.500 al año.
A diferencia de los estadios iniciales del cáncer de mama, el diagnóstico de una enfermedad metastásica trae consigo un impacto emocional devastador para las pacientes y sus familias.
“Te cambia la vida radicalmente porque la enfermedad pasa a ser incurable y vives con un miedo constante”, cuenta a este diario Gema Rodríguez Recio, paciente y vicepresidenta de la Asociación Española Cáncer de Mama Metastásico (AECMM).
Como explica la doctora Blanca Cantos, del departamento de Oncología del Hospital Universitario Puerta del Hierro-Majadahonda, “un 30% de los cánceres de mama en estadios precoces pueden convertirse en metastásicos, lo que agrava significativamente el pronóstico”.
Una enfermedad que “te cambia la vida”
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Gema Rodríguez tiene 47 años, es madre de dos hijos y le diagnosticaron cáncer primario a finales de 2014.
“Cuando una paciente con cáncer de mama recibe la noticia de metástasis todo cambia radicalmente porque la enfermedad pasa a ser incurable y con un pronóstico de vida de unos 5 años. Yo sufrí un shock tremendo. La mayor parte de nosotras hemos pasado anteriormente por un cáncer de mama primario y hemos recibido tratamiento de quimioterapia, radioterapia o intervenciones quirúrgicas”, nos cuenta Gema Rodríguez.
Rintasyövän tutkimus. / Archivo
Tras unos meses o años muy duros, con muchos cambios físicos, psicológicos, y secuelas que quizá nunca se vayan, nos cuenta que es imposible volver a la rutina de tu “anterior vida”.
- El hecho de que sea metastásico “te ata de por vida al hospital“. “La única forma que tenemos de sobrevivir es cambiar de un tratamiento a otro cuando este deje de funcionar, y esto te hace vivir con un miedo constante”.
Cuando se lo detectaron en 2014 estuvo un año y medio de baja laboral. Después volvió, pero en 2017 le diagnosticaron por primera vez metástasis y tuvo que dejar de trabajar para siempre.
La importancia del apoyo psicológico para el paciente: “siempre piensas que es la última vez”
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Recibir un diagnóstico de cáncer de mama metastásico implica una profunda angustia. Aunque existen opciones de tratamiento, la enfermedad es crónica y no curable.
La doctora Blanca Cantos recalca la importancia de establecer una relación de confianza entre médico y paciente: “Es fundamental confiar en el oncólogo y que este entienda las necesidades emocionales que acompañan a un diagnóstico de estas características. La actitud y el apoyo psicológico juegan un papel crucial en la evolución del tratamiento”.
Y, por el lado del paciente, “esta enfermedad te provoca vivir constantemente con miedo y con estrés por los resultados. No solo te afecta a ti, sino a todo tu entorno. Necesitamos más apoyo psicológico, no hay suficiente. Los tratamientos generan altibajos constantemente, no puedes hacer planes con antelación. Quieres seguir estando ahí por tu familia, pero es muy complicado”.
Quieres seguir viviendo por todo tu entorno, pero no puedes evitar pensar que todas las ocasiones especiales son “tu última vez”
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Otra de las principales demandas de las pacientes es la falta de un acceso rápido y continuo a nuevos tratamientos. La doctora Cantos menciona que en España, a pesar de que existen fármacos innovadores aprobados, los procesos burocráticos retrasan su disponibilidad para las pacientes: “Es vital que estos fármacos lleguen lo antes posible, ya que cada nueva opción supone una oportunidad para aquellas pacientes que ya han agotado otros tratamientos”.
Emotionaalinen tuki tässä taudissa on perustavanlaatuinen ja yksi AECMM:n vaatimuksista. / Shutterstock
Este retraso puede afectar significativamente la calidad de vida y las posibilidades de supervivencia de las pacientes. Por todo ello, la vicepresidenta de la AECMM solicita:
- “Mayor colaboración a todos los agentes involucrados en la financiación de nuevos tratamientos para que el proceso sea más ágil y transparente y que los plazos se ajusten a los 180 días como máximo que marca la normativa europea”. Un tiempo que, para ellos, “es el principal enemigo”.
El diagnóstico y los avances en los tratamientos: ¿cuánto imposibilitan al paciente?
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El proceso de diagnóstico del cáncer de mama metastásico puede ser complejo.
Amenudo, se requieren biopsias (extracción de células para examinarlas a fondo) de las metástasis para confirmar su presencia. A pesar de que queda mucho todavía por investigar, en los últimos años ha habido importantes avances en su tratamiento.
Desde que se sospecha la enfermedad hasta su confirmación pueden pasar aproximadamente unas cuatro semanas
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- “Los efectos secundarios que implican los tratamientos son en ocasiones muy difíciles de sobrellevar, a pesar de toda la medicación o cuidados que tengamos para intentar paliarlos. Limitan y condicionan tu vida. Es necesario que las pacientes cuenten con equipos de atención multidisciplinar, que puedan ver al paciente de forma integral, y que puedan hacer derivaciones más ágiles a otras especialidades cuando sea necesario”, explica la paciente.
Los efectos secundarios conllevan incapacidad laboral, de discapacidad e incluso situaciones graves de dependencia. No solo afectan al paciente, sino que complican toda su esfera familiar por el alto impacto social y económico.
Espanjassa diagnosoitiin vuonna 2023 noin 35 312 uutta rintasyöpää / FERRÁN NADEU
En cuanto a los tratamientos, la oncóloga destaca que “nuevos tratamientos dirigidos han permitido aumentar la supervivencia de las pacientes y reducir los efectos secundarios asociados a la quimioterapia”.
Entre estos avances, se encuentran:
Gema, en su caso, se encuentra ante la sexta línea de tratamiento (cada línea significa un tratamiento diferente). “Por desgracia no hay un tratamiento único. Vas consumiendo opciones para tratarte y llega un punto que se agotan. Yo voy por la sexta y no he querido preguntar cuántas me quedan“.
Tipos de cánceres de mama
- Cáncer de mama luminal A: receptores hormonales positivos, crecimiento lento y buen pronóstico. Responde bien a la terapia hormonal.
- Cáncer de mama luminal B: más agresivo que el luminal A, con posible sobreexpresión de HER2 (proteína que fomenta el crecimiento rápido de las células cancerosas del seno). Requiere tratamientos hormonales y quimioterapia.
- Cáncer de mama HER2 positivo: sobreexpresión de HER2, más agresivo, pero con tratamientos efectivos como anticuerpos monoclonales.
- Cáncer de mama triple negativo: no tiene receptores hormonales ni HER2, es el más agresivo y con menos opciones de tratamiento.
- Cáncer de mama inflamatorio: tipo agresivo que causa enrojecimiento e inflamación en la piel de la mama.
- Cáncer de mama metastásico: cáncer avanzado que se ha diseminado a otras partes del cuerpo. Tratamientos buscan mejorar la calidad de vida.
- Carcinoma ductal in situ (CDIS): cáncer no invasivo (que no se expande) en los conductos de la mama. Buen pronóstico si se trata a tiempo.
- Carcinoma lobulillar in situ (CLIS): no es invasivo, pero aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de mama invasivo.
- Carcinoma ductal invasivo (CDI): tipo más común de cáncer invasivo que se origina en los conductos y se extiende al tejido mamario.
- Carcinoma lobulillar invasivo (CLI): se origina en los lobulillos de la mama y se extiende al tejido circundante.
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Sobre los tiempos marcados en los tratamientos, “la principal barrera que sufrimos es el enorme retraso que hay desde que son aprobados por la Agencia Europea del Medicamento hasta que se aprueba su financiación en nuestro Sistema Nacional de Salud para que cualquier paciente pueda recibirlos en su hospital”, nos cuenta Rodríguez Recio.
“Como vicepresidenta de la asociación pido más colaboración a todos los agentes involucrados en la financiación de nuevos tratamientos para que el proceso sea más ágil y transparente y que los plazos se ajusten a los 180 días como máximo que marca la normativa europea. Y también reclamamos que una vez aprobados, estas nuevas terapias estén disponibles para todas las pacientes en todos los hospitales de todas las Comunidades Autónomas”, reclama Gema, ya que el tiempo “es el mayor enemigo”.
La importancia de visibilizar el cáncer de mama metastásico
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La Asociación Española de Cáncer de Mama Metastásico (AECMM) trabaja para dar visibilidad a esta realidad a menudo olvidada.
En colaboración con las empresas Daiichi Sankyo y AstraZeneca, han lanzado la campaña #laMquefalta para concienciar sobre la necesidad de incluir la “M” de metastásico en las conversaciones sobre cáncer de mama.
“LaMquefalta”-kampanja pyrkii lisäämään tämän “todellisuuden” näkyvyyttä. / AECMM
Ciudades como Madrid, Málaga y Las Palmas de Gran Canaria han instalado letras monumentales sin la “M” en sus nombres, para llamar la atención sobre esta lucha silenciosa que afecta a tantas personas. Según Pilar Fernández, paciente de cáncer de mama metastásico y presidenta de la AECMM, “es crucial que la sociedad conozca la realidad de este tumor y que las pacientes sientan el apoyo y la empatía de su entorno”.
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“No estás sola. Déjate cuidar y confía en los grandes profesionales sanitarios que tenemos en España”, recalca Gema, que es un claro ejemplo de que se puede luchar contra esta enfermedad.
